“Estudiar la espiritualidad permite alcanzar el suceso”.

Humberto Rodrigues

Algunas personas que se inician en el estudio reflexivo de la filosofía racionalista cristiana se preguntan: “Por qué los espíritus del Astral Superior no posibilitan a todos que sean felices?”. ¿Por qué no acaban con las guerras, a fin de que la humanidad viva en paz?. Eso no ocurre porque existen leyes evolutivas, que son naturales e inmutables, conforme es mencionado en la irradiación “A” de la práctica disciplinaria diaria de limpieza psíquica. Si alguna de esas trascendentales leyes fuese ignorada, el Todo Universal, del cual también hacen parte las Fuerzas Superiores, entraría en desequilibrio, como, por ejemplo, en el caso de no respetar la ley evolutiva de causa y efecto.

Por esa razón, todos los seres humanos poseen libre albedrío, pues es mediante esa facultad espiritual que cada habitante del planeta conduce la vida de acuerdo con su forma de pensar y accionar. Cuando las personas no tienen consciencia de sus actos y actúan de forma impulsiva, acaban cometiendo diversos errores, justamente por desconocer las trascendentales leyes evolutivas y los naturales atributos que poseen. Uno de esos atributos espirituales es el raciocinio, que posibilita reflexionar sobre las propias acciones. Por eso, la importancia del raciocinio es fundamental para que se pueda vivir con más serenidad y mayor conscientemente por todo aquello que se quiere realizar en la vida. En ese caso, es esencial estudiar la espiritualidad defendida por el Racionalismo Cristiano, cuyo aprendizaje se da de forma gradual, pues nadie comienza sabiendo todo. Con el tiempo, cada estudioso va alcanzando el conocimiento espiritual necesario para encontrar la felicidad que procura.

Para algunos, la felicidad está en la posesión de bienes materiales, en cuanto para otros está en la paz interior. La paz de espíritu puede ser conquistada desde que se haga uso del raciocinio y de la auto reflexión – algo que recomendamos a todos practicar por 15 minutos antes de las irradiaciones disciplinarias de la ya mencionada limpieza psíquica diaria – a fin de que se conozcan mejor, identificando y corrigiendo sus errores y, así, obteniendo resultados positivos en sus acciones.

Perciban, entonces, que el raciocinio lúcido y el hábito de la auto reflexión son indispensables, pues es por medio de ellos que los seres humanos tomarán consciencia de que son espíritus en evolución en posesión de un cuerpo físico y decidir de qué forma desean conducir sus vidas, alineando el modo de vivir a sus objetivos materiales y espirituales. Por lo tanto, el estudio de la espiritualidad es necesario para que todos puedan alcanzar sucesos en los negocios y también en la vida personal, familiar y social. Practiquen la auto reflexión, raciocinen, insistimos y encontrarán lo que verdaderamente les proporcionará el sentimiento de felicidad en el día a día de la existencia.