Use correctamente el libre albedrío
Es importante que las personas valoricen su vivir. Pero, para eso, deben ser leales, justas y verdaderas. Conscientes de los deberes a cumplir, precisan colocar su fuerza de voluntad al servicio de la práctica del bien, no contribuyendo, así, con la expansión de las acciones maléficas infelizmente observadas en la vida cotidiana.
Todos tienen la responsabilidad de llevar adelante en este plano físico lo que traen en el alma como proyecto evolutivo planeado en campo astral. Luego, los seres humanos se obligan a usar el libre albedrío de forma correcta, pues de el dependen los sucesos o los fracasos de la vida. El éxito requiere actitudes dignas, serenas y valerosas, porque son características del valor como aspecto destacado de la personalidad.
Lo que no falta en el mundo son los disgustos, acontecimientos desagradables, influencias negativas. Son cosas hasta difíciles de creer que existan, pero que afectan el comportamiento de las personas. Aunque los hechos precisan ser enfrentados con valor, coraje y sin lamentaciones, pues no hace parte del ideario espiritualista del Racionalismo Cristiano, pero, si, la fortaleza de ánimo y el entusiasmo, sin los cuales es grande la probabilidad de enlazamiento con espíritus desprendidos de la materia física que vagan por los campos vibratorios densos formadores de la atmósfera fluídica de la Tierra.
En las casas racionalistas cristianas, ayudamos a las personas con palabras y actividades que fortalecen y esclarecen, haciendo que despierten para la espiritualidad mediante manifestaciones de Fuerzas Superiores y recomendaciones de los orientadores de las reuniones públicas, que extienden el conocimiento a los asistentes sobre los fenómenos trascendentes y les muestran caminos seguros para transitar en este mundo.
Se engaña quien cultiva la ilusión de dejar la vida correr con la esperanza de recoger solamente cosas buenas. Todos tienen que estar preparados para los buenos y malos acontecimientos. De modo general, los hechos ruines que aparecen en la vida de las personas son consecuencia de pensamientos y sentimientos negativos, del mal uso del libre albedrío, del desconocimiento de las trascendentes leyes evolutivas al ser contrariadas en el transcurrir de la existencia.
Por ser muchos los hogares con un ambiente fluídico precario, en razón del comportamiento inadecuado de uno o más de sus miembros, todos los familiares, sin excepciones, quedan también envueltos por esas corrientes dañinas a la salud física y psíquica. De ahí la recomendación sobre la importancia de la limpieza psíquica diaria. Concentrados en el significado de las palabras que componen las irradiaciones, atraerán a las Fuerzas Superiores y reciben sus fluídos fortalecedores, eliminando las influencias perturbadoras del medio en que viven.
Los seres humanos están en el planeta escuela Tierra para adquirir en la existencia en curso los conocimientos necesarios a la evolución mediante lecciones de alto valor moral que aun no absorbieron en las innumerables existencias por la que ya pasaron. Todos tienen defectos a ser eliminados del subconsciente con actos de valor que engrandecen la personalidad y dignifican el carácter. Es lo que deseamos a las personas que comparecen a las casas racionalistas cristianas en el ámbito mundial, que oyen con atención nuestras orientaciones y las colocan en práctica en lo cotidiano de sus vidas.
Antonio Cottas
En los momentos difíciles es hora de reaccionar.
Hay personas que se ligan demasiado a los sufrimientos, reveses, infortunios y desatinos humanos divulgados actualmente por los medios de comunicación, a punto de entristecerse de tal forma que pasan a observar la vida desprovista de los colores que avivan el semblante al crear cuadros mentales fluídicos carentes de energía espiritual.
Es el momento en que las personas espiritualmente debilitadas deben reaccionar. Un buen comienzo es procurar entender el propio comportamiento, analizando los pensamientos y sentimientos, la forma como lidian con las situaciones cotidianas y tratan a los semejantes. Reconociendo lo que traen en el alma, los valores que revelan la esencia que son como espíritus en evolución en la Tierra, estarán aptas a ser mejores en cada día al reconocer que los deseos y las ambiciones, los atractivos materiales y todo lo que la mayoría de los seres humanos piensan que tienen valor no pasan de ilusiones efímeras de la vida, pues nada acrecientan al patrimonio espiritual.
A lo largo de la existencia, el ser humano enfrenta situaciones que provocan el uso de atributos espirituales, sea del raciocinio para encontrar soluciones adecuadas a los problemas por los que pasa, del dominio propio que asegura el control íntimo que evita las actitudes impensadas o del equilibrio psíquico revelador del buen comportamiento.
¿Cómo utilizar de forma adecuada esos y tantos otros atributos con tranquilidad espiritual? Eso es posible solo con el estudio de la espiritualidad.
El esclarecimiento espiritual recomienda educación, disciplina y voluntad en el gobierno de los pensamientos y el entendimiento de las leyes evolutivas, pues la falta de su comprensión es motivo frecuente de desequilibrios psíquicos. Depende, entonces, del conocimiento de la espiritualidad el mejor aprovechamiento de la existencia. Al dejar este mundo de escolaridad, el espíritu ya desprendido de la materia física retorna progresivamente a su mundo de estadio, donde analiza detenidamente las existencias anteriores, especialmente la que finalizó.
De ese análisis crítico, siempre auxiliado por Fuerzas Superiores de mayor evolución, el espíritu decide agregar al conjunto de cualidades morales que ya posee los valores espirituales que desenvolvió en el pasaje más reciente por la Tierra, definidores de ascensión a clase evolutiva inmediata. Si aún restan atributos y facultades a ser mejorados, nuevo planeamiento es hecho en campo astral, a ser concretizado en plano físico, sometiéndose otra vez, al proceso evolutivo que la realidad terrena exige.
La secuencia evolutiva es siempre progresiva, hasta que el espíritu no necesite más de las enseñanzas que el planeta escuela Tierra puede ofrecer a su crecimiento. De ahí por delante, buscará las fuentes de sabiduría existentes en los campos superiores de la espiritualidad.
Como es bella y rica la evolución de las emanaciones de la Inteligencia Universal! Los seres humanos no pueden quedar ligados a las pequeñeces de este mundo, sometidos a las pasiones y a todos los excesos, como el sentimentalismo exagerado. El espíritu es inteligencia, es vida, es poder creativo y realizador. Luego todos tienen fuerza espiritual para luchar y vencer. Para aprovechar bien la estadía en este mundo basta que disciplinen su vivir y tengan pensamientos elevados, ligándose a las corrientes vibratorias del progreso.
Humberto Rodrigues
Traducción al español por Adelina González Bermúdez