Lectura del mes – Noviembre 2017

El ser humano debe trabajar, porque el trabajo es la mejor distracción del espíritu, es el medio a ser por él usado para mantener el equilibrio síquico. Cuando hay ocupación, el pensamiento, siendo vibración del espíritu, está a su vez también ocupado, no irradia vibraciones negativas, que son peligrosas, pues atraen espíritus del astral inferior. Cuanta gente desconoce que esas fuerzas dañosas existen, y que es preciso tener cuidado con ellas. Cuanta gente desconoce los motivos de los males psíquicos, y que para evitarlos es necesario hacer con que el espíritu esté siempre alerta.

El Racionalismo Cristiano es una filosofía espiritualista que trata de la evolución del espíritu. Explica a los seres humanos lo que ellos son y hacen en el planeta escuela Tierra, preparándolos para la verdadera vida, que es la vida espiritual. Aún, para evolucionar en este mundo de escolaridad, los espíritus se valen de la materia física densa. Los individuos que se dejan envolver por materialidad exacerbada serán futuros juguetes de espíritus desencarnados que deambulan por el astral inferior. Cuando las actividades terrenas son desarrolladas por personas psíquicamente desequilibradas, se resienten por su estado perturbado.

Es importante comprender bien la razón de ser de ciertos acontecimientos para hacer evolución. Muchas personas se perturban psíquicamente por desconocer lo que es la vida fuera de la materia física, por no tener el esclarecimiento espiritual necesario para reaccionar a los malos pensamientos y evitar sus consecuencias.

La vida en la Tierra trae muchas preocupaciones para los seres humanos. Todos tienen contrariedades, perjuicios, cuidados, una serie de hechos que pueden perturbar al espíritu. Si colocaren en acción los atributos espirituales innatos, sobre todo el raciocinio y la voluntad, todo resolverán con mayor comprensión y claridad.

El Racionalismo Cristiano esclarece a las personas, preparándola para pisar con firmeza el camino de la evolución espiritual y del progreso material en la Tierra, obteniendo de ese crecimiento continuo el mejor provecho posible, para que, aflorando de lo íntimo los valores espirituales ya conquistados, tengan el agradable sentimiento del deber cumplido.

Todos viven, no hay duda, pero como viven ciertos individuos, preguntamos? En completa perturbación síquica, respondemos, en un perfecto estado de ruina moral y material, de constante confusión y disentimiento. Para que eso sea evitado es que el Racionalismo Cristiano enseña a los seres humanos a evolucionar a través de la práctica del bien, reaccionando a los malos pensamientos y sentimientos de debilidad, a fin de mantenerse espiritualmente equilibrados.

Las personas equilibradas no hace tonterías, no practican desatinos, no cometen crímenes. Sabemos que perfección de carácter no existe, pero pueden aproximarse de la perfección desde que nada hagan sin el examen previo de consciencia.

Aprovechen las enseñanzas que el Racionalismo Cristiano ofrece a los estudiosos de esa filosofía espiritualista, porque no hay otro interés que no sea el de ver a los seres humanos vivir en este mundo de escolaridad con valor y comprensión, y evitar sufrimientos innecesarios.

Luiz de Mattos

 

 

La espiritualidad no debería quedar meramente restricta a su concepto, a su definición, por los seres humanos. La espiritualidad debería ser tomada en consideración como la propia esencia de la vida en este planeta escuela, donde los espíritus encarnan para hacer sus trayectorias evolutivas como partículas del Principio Inteligente incitando a la materia densa, pasiva y amoldable.

Los espiritualistas adquieren la capacidad de manifestar en su esencia sus genuinos atributos. Comprenden las diferencias de niveles evolutivos de los seres humanos, de ahí sean tolerantes con los individuos próximos. No dan tanto valor a las cosas pequeñas del mundo físico, pues se separan de las cuestiones puramente materiales sin esfuerzo, sufrimiento o privación. Los esclarecidos fortalecen los sentimientos elevados y los pensamientos positivos al ligarse a las Fuerzas Superiores. Diríamos, metafóricamente, que no pertenecen mas a este mundo físico aun tan denso.

Las personas verdaderamente espiritualizadas abandonan tendencias egoístas, substituyéndolas por altos ideales constructivos, que visan el bienestar individual y el bien de la colectividad. Manifiestan los elevados sentimientos de renuncia, humildad, fraternidad y solidaridad.

Así, para tener mayor espiritualización, es necesario que las personas estudien, encima de todo a sí mismas, buscando la esencia espiritual que todas traen en lo íntimo. Hay individuos que hasta se esclarecen sobre las llamadas cosas del espíritu pero no llegaron a la elevada espiritualidad y, por eso, ni siempre consiguen expresar sus atributos y sus facultades espirituales en su máxima potencialidad, pues aun se dejan llevar por influencias del mundo físico.

El perfeccionamiento espiritual es una conquista gradual hecha de luchas y determinación, para corregir imperfecciones y evitar errores. Todos transitan por el camino evolutivo y llegan a niveles superiores de espiritualidad a medida que se identifican con el Todo Universal, del cual hacen parte. Como emanaciones de la Inteligencia Universal, no dan tanta importancia a los reveses, a las dificultades, por haber ampliado la propia inteligencia, y, así, la capacidad del raciocinio y del dominio propio.

 

Es fundamental luchar por la evolución espiritual, pues vale la pena, por ser la evolución el principio fundamental de la vida en el Universo. Personas con buen nivel de evolución rechazan todo lo que es indigno, deshonesto desleal y violento, pues tienen buenos pensamientos y sentimientos, protegiéndose a sí mismas de las influencias dañinas del mundo físico y del espiritual al expresar valores de mayor dimensión.

 

Por lo tanto, esclarézcanse espiritualmente, observando para lo íntimo de sí mismos, insistimos. Procuren sus imperfecciones y encuentren lo que deben mejorar. Eduquen los pensamientos, controlen las emociones, manifiesten buenos sentimientos.  Hagan la limpieza síquica diaria, para que puedan raciocinar con claridad. Libres de las influencias del astral inferior, podrán mejor aprovechar las enseñanzas que la propia vida propicia a todos, para que conquisten niveles mas elevados de espiritualidad, el mayor objetivo de los seres humanos en la Tierra.

Humberto Rodrigues

Traducción al español por Adelina González